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» Parejo a la terciarización con oficinas, se consolida y densifica la actividad comercial en torno a la calle a principios de los años setenta. Derribado el palacete de la familia Tartiere, inmenso chalet entre la secesión vienesa y el Regionalismo, se construye la sede de la desaparecida Galerías Preciados.A pesar de lo radical de la propuesta, siguiendo las pauta estéticas de otros establecimientos de la cadena realizados por los autores, es un edificio sumamente adaptado a su entorno urbano, como se plasma en la cuidadosa solución de su contorno, al cual sirve de remate compositivo la sofisticada celosía metálica, articulada con los edificios colindantes.Presenta ya un gran almacén moderno y cerrado, donde no se desperdicia ningún espacio expositivo, ni siquiera en las fachadas y donde las circulaciones centrales determinan el forzado recorrido comercial que es obligatorio realizar.
La cafetería en la última planta forma parte del reclamo, en un momento en que todavía el comercio disfrutaba de la ciudad como pretexto y le devolvía una mirada, reflejada en la calidad de los materiales prefabricados, que han demostrado su vigencia con los años. || Guía de arquitectura y urbanismo de la ciudad de Oviedo |